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Libros: Diez sugerencias para saber de flamenco

Libros: Diez sugerencias para saber de flamenco

Diez libros, si no imprescindibles, sí muy aconsejables para unos días de lectura flamenca. Hoy Día del Libro, te invitamos a iniciar una aventura rebosante  de misterio y perdida en los recovecos del tiempo, “el flamenco”, tan cerca y tan lejos, poblada de personas y memorias que aun en nuestro tiempo son la base fundamental de lo que conocemos y que inspira a nuestros artistas mas reconocidos y a los no tanto, a ocupar un arte admirado mundialmente. Por la cultura al mundo. Que los libros te acompañen.

1º- Mundo y forma del cante Flamenco. Ricardo Molina y Antonio Mairena

La Biblia. Así se calificó el libro ‘Mundo y formas del cante flamenco’ del poeta cordobés Ricardo Molina y del cantaor sevillano Antonio Mairena. Una obra que se convirtió en un auténtico fenómeno editorial y que sigue siendo el evangelio para unos pocos aficionados a este arte.

Editado en el año 1979 por Al-Andalus y cuya primera edición tuvo lugar en el año 1963. Obra considerada por muchos como la Biblia del Flamenco, por su completo y complejo contenido, pero aún para muchos un libro fundamental de la bibliografía flamenca, a pesar de sus posibles errores en contenidos hoy superados y desfasados, pero de gran interés por la luz que arroja sobre el desarrollo del Flamenco en los años sesenta y setenta. El libro surge en ese contexto flamenco, tras la etapa  denominada Ópera Flamenca (1920-1955), con sus luces y sus sombras, y ante la demanda de información en un periodo de creciente interés por el Flamenco.

El pecado cometido por sus autores, según algunos estudiosos, fue su atrevido carácter “gitanista”, olvidando quizás, que ya con anterioridad “Demófilo” hizo hincapié en su obra de la indiscutible aportación del gitano en el cante-jondo, pero entonces no había nadie que se interesase por este fenómeno del flamenco, de ahí que “Mundo y Forma del cante flamenco” pudiese ser atacado desde su nacimiento por su “hipergitanismo”, aunque estudios como Bernad Leblon defendió que la idea de la “creación gitana” está basada en un “hecho histórico indiscutible”.

Pero fue en los años noventa cuando esta inquina “antigitanista” fue tomando fuerza con las aportaciones de José Luis Ortiz Nuevo, Agustín Gómez, Manuel Bohórquez, Antonio Burgos, etc, muchos de los cuales seguro que no se hubiesen atrevido estando en vida el maestro de Mairena. No obstante también fueron muchos los que defedieron su obra como Juan Toro,  Fernando Quiñones, Cristina Cruces, José Luis Buendía,  o como hoy en dia José María Vázquez Gaztelu, a pesar de que algún aspirante a flamencólogo, en un libro sobre el Carnaval de Cádiz, llegase a calificar la obra como la “Biblia flamenca en pasta”, y presentar al autor  como una gran moneda de dos caras: el anverso auténtico, y el reverso falso, es decir, como cantaor grandísimo, como escritor, mediocre y fraudulento, incluso llego a denominarlo como  “flaméncolico”, tan solo por querer exponer  sus ideas y su pensamiento, ante un mundo payo que se iba fagocitando en el verdadero flamenco. ¡Con el siglo XXI llegaron los nuevos profetas del flamenco!

2º Memoria del Flamenco, Félix Grande. Dos tomos editados por Selecciones Austral, Espasa Calpe 1979.

Como el propio escritor explicó  en su momento, el contenido de Memoria del flamenco. «El libro tiene tres núcleos protagonistas. En primer lugar, un acopio de datos y de interpretación de esos datos sobre la Andalucía social desde el siglo XVI hasta nuestros días, puesto que es en Andalucía, y dentro de esas fechas, donde se entrelazan todos los elementos musicales, sociológicos y raciales que formarán finalmente el flamenco. Otro núcleo consiste en acompañar a los gitanos desde su salida de la India, su patria de origen, hace miles de años, a su paso por distintos países europeos y en su permanencia en España desde principios del siglo XV. Además, hago un recorrido por la historia conocida del arte flamenco, desde finales del siglo XVIII hasta nuestros días. “He puesto el título de Memoria del flamenco porque «el libro es, en sentido estricto, un informe, una memoria sobre el flamenco, pero sobre todo porque el elemento fundamental de la capacidad expresiva y comunicativa del cante es la memoria. En el caso de la Baja Andalucía, la memoria de su pobreza secular; en el caso de los gitanos,la  memoria de su marginación civil y racial; en el caso específico de la música, que hoy llamamos flamenca, la memoria de abundantes siglos de tradición musical andaluza, lo cual equivale a decir oriental, bizantina, morisca, judía, etcétera. El libro comienza con una soberbia frase de Caballero Bonald: «El cantaor no inventa: recuerda.» Hay que tener en cuenta que en el flamenco, como en todo arte profusamente existencial, hay una moral de la memoria y hasta una metafísica de la memoria.»

3º Historia Social del Flamenco, Alfredo Grimaldos. Edita, Península-Atalaya, Grupo Planeta 2013.

El flamenco es un arte de transmisión oral que, durante mucho tiempo, se ha preservado, fundamentalmente, en el seno de grandes dinastías gitanas de la Baja Andalucía, transmitiéndose de generación en generación en el ámbito familiar y en el barrio. En sus letras hay un poso de rebeldía, fruto de la persecución y la marginación. Durante los años 30, se dedicaron fandangos al capitán de Jaca Fermín Galán y a las «banderitas republicanas». Por otro lado, a lo largo de los últimos años del franquismo y la Transición, numerosos artistas adquirieron un claro compromiso sociopolítico. Del duro trabajo en el campo y las noches en vela cantando para los señoritos en las ventas, los flamencos pasaron a los tablaos y los festivales veraniegos, primero, para alcanzar después, los teatros. Los profesionales del arte jondo gozan hoy de mayor consideración social que nunca, aunque en el camino se hayan perdido muchas cosas. La crónica de esta evolución la hacen aquí sus propios protagonistas: Antonio Mairena, El Sordera, Farruco, Juan Habichuela, Juan Varea, Rancapino, Fernanda de Utrera, Chano Lobato, José Menese, Enrique Morente, Paco de Lucía… Figuras incuestionables de este arte y, algunos de ellos, grandes patriarcas gitanos. Los testimonios han sido recogidos por el autor que, con ritmo periodístico y rigor en clave de tragicomedia, transita desde la pena de la seguiriya al envolvente compás de las alegrías de Cádiz.

4º De Cádiz y sus Cantes, Fernando Quiñones. Edita, Fundación José Manuel Lara

De Cádiz y sus Cantes es una obra de referencia no sólo para conocer los orígenes y el desarrollo del flamenco en una de sus cunas más genuinas, sino también para acercarse al alma de una ciudad que tuvo en Fernando Quiñones a una de sus voces más originales y esclarecidas.

5º Ayer y Hoy del Cante flamenco. Manuel Rios Ruiz. Ediciones ISTMO S.A 1997

Esta obra reúne una serie de trabajos en torno a las distintas épocas del cante y a la evolución de sus estilos, afrontando de manera original sus formas y las características de sus más significativos intérpretes, configurando un ensayo sumamente peculiar en el género.

6º El Arte del Flamenco, Donn E. Pohren. Edicion de Sociedad de Estudios Españoles/ Finca Espartero 1962.

Donn E. Pohren (1929-2007) fue un guitarrista e historiador estadounidense. Es conocido por sus tres textos principales sobre el flamenco: El arte del Flamenco (1962) vidas y leyendas del flamenco: una historia biográfica (1964) y Una forma de vida (1980). Es el único no español en recibir el titulo de flamencólogo por la Catedra de Flamencologia. Procedente de Minneapolis,

se mudó a Sevilla, se casó con la bailaora Luisa Maravilla. Solia decir que se llamaba Daniel Maravilla y que su madre era española, lo que le ayudaba a ser aceptado.

El Flamenco no es sólo una música del sur de España, como generalmente se cree. Más que eso, es una forma de vida que influye en las actividades diarias de muchos españoles del sur. No hay que ser un artista de flamenco para ser flamenco: flamenco es todo aquel que está emocional y activamente comprometido con esta filosofía única. Por esta razón, ningún libro estará completo si trata únicamente del arte del flamenco, porque este arte es sólo la manifestación externa del modo de vivir flamenco. Al lector debe hacérsele comprender algo de sus creadores y perpetuadores, de sus filosofías, actitudes,costumbres, creencias, gustos y aversiones. Es necesario comprender, no solamente lo que el flamenco es, sino porque lo es.

Nº7 La discoteca ideal de flamenco, Ángel Álvarez Caballero. Planeta 1995.

Libro editado por la Editorial Planeta en el año 1995, en el que su autor  ha realizado una obra completa y rigurosa sobre la historia del flamenco y sus mejores intérpretes, estructurada alfabéticamente por cantaores, guitarristas y estilos, así como una amplia selección discográfica de las mejores grabaciones en CD.

Guía recomendable para todo buen aficionado, ya que con ella además de adquirir determinados conocimientos sobre grandes intérpretes, les permitirá obtener una adecuada relación de sus mejores grabaciones.

Nº8 Caballeros Flamencos, una visión de Paco Manzano. Edita Everest 2005.

La extensa obra de un fotógrafo que ha estado ahí en los momentos más importantes del flamenco, fotografiando a muchos caballeros: Rancapino, Juanito Villar, José el Negro, Paco de Lucía, Manolo e Isidro Sanlúcar, Chaquetón, Camarón de la Isla, José Mercé, Sordera, Manuel Agujetas, Manuel Moneo, El Torta, Fernando el de la Morena, Parrilla, El Nano, Terremoto, Capullo de Jerez, Chocolate, Fosforito, Morente, Mario Maya, Juan Valderrama, Farruco, Arturo Pavón, José Menese, Manuel Mairena, Enrique de Melchor, Pedro Bacán, Lebrijano,  El Cabrero, Calixto Sánchez, Rafael Riqueni… Dice en el prólogo el escritor y musicólogo José Manuel Gamboa “con Paco podemos acceder a la trastienda del quejío, de la planta, la punta y el tacón, de la bajañí, las palmas y los cajones. Pero, sobre todo, alcanzamos a la expresión artística en su plenitud, a la escena flamenca desde un privilegiado observatorio”.

Nº9 Sobre Camarón, La leyenda del cantaor solitario. Carlos Lencero. Edita: ALBA minus 2004.

Es una obra con base emocional en la que ha colaborado mucha gente, pero he querido mantenerme al margen de la familia», explica el escritor. «Estoy seguro que lo que más va a sorprender es que su vida no fue tan espectacular como piensan, no fue un Mick Jagger del flamenco; sino que fue un hombre sencillo, humilde que no se diferenció de los de su generación», afirma Lencero. El escritor también advierte de que él no dice que todo lo que hizo fue maravilloso porque, «aunque siempre cantaba bonito», había cantes que no eran para su voz.

10º FLAMENCO, orientalismo, exotismo y la identidad nacional Española. Trinidad Pardo Ballester. Editorial Universidad de Granada.

El libro analiza cómo varios discursos orientalistas y exóticos sobre la cultura del flamenco, creados por varios representantes de tres movimientos culturales (romanticismo, modernismo y posmodernismo) y de una ideología política (franquismo), contribuyeron a dar forma a nuestra moderna identidad nacional española. Se investigan dos mitos: el de la España exótica y el de Carmen, así como el producto de los mismos: el género de la “españolada” y la domesticación de lo exótico, expuesto en el estudio sobre la mantilla española y sobre la figura del torero, dada la relación entre flamenco y toreo. La transformación y el flujo de esos mitos a través de los estudios de los cuatro tipos de orientalización.

 

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