Ha fallecido hoy, 4 de diciembre, en Madrid el periodista y escritor Alfredo Grimaldos, autor referencial del flamenco rebelde, desde que publicó una ‘Historia social del flamenco’ (Ed. Planeta, 2013). Foto de Alfredo en la presentación de su último libro en 2017 por @ZocoFlamenco.
Grimaldos, comprometido siempre frente a las injusticias sistémicas, acercó en sus libros esta visión del flamenco desde el plano de la rebeldía, y reivindicó las letras del cante profundo, que desde sus orígenes han servido como medio para expresar la injusticia, las reivindicaciones históricas del flamenco.
Alfredo Grimaldos fue director de la revista flamenca ‘Cabal’ (1982 a 1985), y director y presentador de los programas de radio ‘La hora del duende’ y ‘A compás’. Crítico flamenco en El Mundo durante décadas. y ha escrito los libros ‘Luis de la Pica. El duende taciturno’ y ‘Flamencos en el Ferrocarril.
Siempre tuvo esta visión y fue la que reivindicó en su trayectoria: “El flamenco es un arte de transmisión oral que, durante mucho tiempo, se ha preservado, fundamentalmente, en el seno de grandes dinastías gitanas de la Baja Andalucía, transmitiéndose de generación en generación en el ámbito familiar y en el barrio. En sus letras hay un poso de rebeldía, fruto de la persecución y la marginación. Durante los años 30, se dedicaron fandangos al capitán de Jaca Fermín Galán y a las «banderitas republicanas». Por otro lado, a lo largo de los últimos años del franquismo y la Transición, numerosos artistas adquirieron un claro compromiso sociopolítico. Del duro trabajo en el campo y las noches en vela cantando para los señoritos en las ventas, los flamencos pasaron a los tablaos y los festivales veraniegos, primero, para alcanzar después, los teatros. Los profesionales del arte jondo gozan hoy de mayor consideración social que nunca, aunque en el camino se hayan perdido muchas cosas. La crónica de esta evolución la hacen aquí sus propios protagonistas: Antonio Mairena, El Sordera, Farruco, Juan Habichuela, Juan Varea, Rancapino, Fernanda de Utrera, Chano Lobato, José Menese, Enrique Morente, Paco de Lucía… Figuras incuestionables de este arte y, algunos de ellos, grandes patriarcas gitanos. Los testimonios han sido recogidos por el autor que, con ritmo periodístico y rigor en clave de tragicomedia, transita desde la pena de la seguiriya al envolvente compás de las alegrías de Cádiz”.
Otros libros publicados, en la esfera del flamenco, son: “Luis de la Pica. El duende taciturno” (libro +CD 2011 edición revisada). Una biografía con entrevistas a algunos artistas que conocieron a Luis de la Pica. El libro contiene las letras de los cantes que están en el CD, además de otras compuestas por el cantaor jerezano. Luis de la Pica (1951-1999) jamás pisó un estudio de grabación y fue tan reacio a cantar en público como a hacerlo fuera de Jerez.
‘Flamencos en el Ferrocarril’ (2017, Ediciones El Boletín), un curioso libro de viaje, que cuenta las anécdotas de los artistas cuando subían de Andalucía a Madrid en tren. En el prólogo, Juan José Téllez, comenta: “El tren está presente en la biografía de los creadores flamencos, en las letras y en la atmósfera en que transcurrió su historia y su leyenda… El tren quizá aceleró la transformación y el mestizaje de los cantes, en un triángulo mítico que unía a Sevilla, Jerez, los puertos y Cádiz, pasando por los andenes de Lebrija y de Utrera, otra explicación plausible a cómo ha ido evolucionando este arte”.
Descansa en paz, maestro. Tus libros y enseñanzas quedarán para siempre entre nosotros.