La cantaora Argentina estará el 18 de enero de 2019 en el ciclo “Andalucía Flamenca” en el Auditorio Nacional de Madrid, donde también se darán cita El Pele, Dani de Morón, David Palomar o Mayte Martín entre otros. Foto de El Pele (15 febrero), por Zoco Flamenco.
“Brilla este programa con luz propia en el Auditorio Nacional de Música madrileño, gracias al trabajo conjunto mantenido por el Instituto Andaluz del Flamenco y el CNDM. Esta colaboración mutua se prolonga desde 2008. Fue ese el primer año en el que comenzamos a recorrer una senda común que nos ha llevado por los más jondos vericuetos del arte, que ha llevado al público de este escenario, uno de los mejores del mundo, a vivir con intensidad las formas cantaoras, bailaoras y guitarrísticas de Andalucía” (María Angeles Carrasco, directora del Instituto Andaluz del Flamenco).
Actuaciones en el Auditorio Nacional. Temporada 2019.
SALA CÁMARA. 19:30 h
18 de enero 2019 ARGENTINA, cantaora
15 de febrero EL PELE, cantaor
8 de marzo DAVID PALOMAR, cantaor
5 de abril VIRGINIA GÁMEZ, cantaora MELCHORA ORTEGA, cantaora ROCÍO BAZÁN, cantaora
10 de mayo Mayte Martín
SALA SINFÓNICA 20:00 h
7 de abril de 2019 DANI DE MORÓN, guitarra. Artistas invitados: ROCÍO MÁRQUEZ, cantaora ANTONIO REYES, cantaor DUQUENDE, cantaor PITINGO, cantaor.
Quién es quién en Andalucía Flamenca
Jesús Méndez, defensor de los cantes de La Plazuela, figura destacada en la seguiriya, la bulería y la soleá, Jesús Méndez nació en el seno de una de las sagas de cantaores más importantes de Jerez, la de los Méndez, cuyo buque insignia fue La Paquera de Jerez. Desde su debut, en 2002, el joven cantaor jerezano ha recorrido el mundo entero, ha pisado los más importantes escenarios y ha formado parte de los mejores festivales. Cantaor de gran brillantez y gran conocimiento de la tradición, es el eslabón que enlaza las raíces del mejor cante de Jerez con las generaciones jóvenes de cantaores.
Esperanza Fernández es hoy una de las voces principales del cante flamenco. Ha recibido la herencia flamenca de una importante familia de este arte, y sorprende, con su juventud, su profundo conocimiento del flamenco tradicional. A sus inmejorables facultades suma su versatilidad a la hora de prestar su voz a otras estéticas musicales. Plantea en De lo jondo y verdadero una búsqueda y recopilación de ciertas interpretaciones de palos del flamenco que actualmente están siendo relegados e incluso, en la mayoría de los casos, olvidados, a la vez que reivindica a figuras fundamentales del cante.
Argentina. En Hábitat encontramos a Argentina en su estado total de compromiso con el arte flamenco, a Argentina en un estado de esencia. Un hábitat natural que ella busca constantemente porque es lo que alimenta su existencia. El directo para Argentina es el motivo de su vida, su forma de comunicar, de expresar, de relacionarse con el mundo de manera tan desnuda como vino a él. Argentina se pone al frente de su nave en cada oportunidad directa para que los vientos que ella misma provoca le guíen por los caminos donde se siente libre, donde se siente artista y donde se siente cantaora.
El Pele. Manuel Moreno Maya, conocido artísticamente como ‘El Pele’ recibió su apodo de Manuel Benítez ‘El Cordobés’. Han pasado ahora 50 años de ese día de 1967, y toma esa fecha para celebrar sus bodas de oro con el cante. Ganador del Primer Premio Cayetano Muriel (1969) y de dos primeros premios del Concurso Nacional de Arte Flamenco de 1983 –La Serneta por soleá y el Pastora Pavón por bulerías–, destaca en los cantes por soleá, seguiriyas, bulerías, fandangos y tonás. Ha conseguido crear nuevos modos expresivos en alegrías, tangos y bulerías a los que imprime un sello moderno y personal.
David Palomar. Cantaor lleno de matices, colores y sabor, su estética cantaora está enmarcada en la escuela gaditana del cante. Artista personal, creativo, actual, único, reivindicativo y respetuoso al mismo tiempo; seguidor y devoto del eco de Juan Villar, la jondura de Santiago Donday, el compás de Mariana Cornejo y los tercios de Enrique el Mellizo, David Palomar se ha ganado por derecho propio ser uno de los relevos generacionales, un digno heredero de Cádiz y sus cantes. Y entiende esta circunstancia como una responsabilidad con su tierra y con el flamenco.
Melchora Ortega, Virginia Gámez y Rocío Bazán. En el cante se anida una amalgama de texturas que lo hacen un arte plural y valioso. Lo demuestran en este recital, Andalucía cantaora III, Melchora Ortega, Virginia Gámez y Rocío Bazán. El pellizco de Melchora, la maestría de Virginia y la naturalidad de Rocío, todas ellas con una trayectoria más que consolidada, las tres dotadas de una garganta que atesora el secreto de la transmisión, capaces de comunicar con el público solamente con su presencia en el escenario, ofrecen en Madrid su esencia, que camina entre ellas por una senda que no se despega del cante tradicional que renuevan con su propia personalidad.
Dani de Morón tomó clases de Alfonso Clavijo, alumno de Manolo Morilla. La Academia de Matilde Coral fue su segunda escuela. Comenzó así a compaginar el toque para el baile con la composición y el toque de concierto. Esta experiencia le abrió el circuito de compañías de baile de la mano de Antonio Canales y Javier Latorre. Creó la música del espectáculo Inmigración, de la Compañía de Ángeles Gabaldón, y fue reclamado por Manuela Carrasco, Javier Barón, Joaquín Grilo, Rosario Toledo, La Macanita, Potito, La Susi, Montse Cortés, José Mercé o Arcángel. Pero fue el ser solicitado por Paco de Lucía como segunda guitarra en la gira de Cositas buenas lo que le catapultó a la primera línea de la guitarra flamenca, logrando luego el Giraldillo del Toque en la Bienal de Flamenco de Sevilla. Ahora llega a Madrid acompañado por invitados de lujo: Rocío Márquez, Antonio Reyes, Duquende y Pitingo.
Mayte Martin. Nacida en Barcelona en 1965, Mayte Martín es una de las cantaoras de mayor prestigio. Posee el aval del reconocimiento de los críticos y de la afición y un interesante fajo de premios. Pero el reconocimiento más extendido le llega de la mano del público, que aprecia su cante preciosista y sereno, lleno de matices. Defiende, desde sus comienzos, una filosofía muy peculiar y un concepto de la profesión absolutamente transgresores, siendo considerada, por su estética artística y su discurso, pionera y puntal del denominado “flamenco catalán” y referente importante de las nuevas generaciones.