Diego Guerrero será el maestro de ceremonias y conductor del ciclo Nuevos Territorios, organizado por la Fundación SGAE* en la Sala Berlanga, los días 25 y 26 de Abril, a las 19:30h. Diego ha seleccionado a los artistas emergentes Reus de la Frontera, Desiré Paredes. Juan Pérez ‘Aure’ y El Cortecitas. El propio Guerrero inaugurará el ciclo con una conversación con el periodista Santi Alcanda.
* ¿Cómo y por qué has planteado esta selección de artistas para el Ciclo Nuevos Territorios?
Pues lo he planteado como una programación que represente las diferentes tendencias actuales del flamenco. Todos ellos son artistas flamencos más que curtidos en esa maravillosa cultura. Desiré es una cantaora en toda regla que aún ejerce en ese fascinante mundo que es el tablao. Lo mismo pasa con la gente de Reus, que la mayoría de ellos sostienen con su cante algunos de los mejores tablaos de Barcelona. Juan Pérez es pianista flamenco casi de nacimiento, aunque además se haya formado en los mejores conservatorios y universidades del mundo en materia de música clásica y jazz. Y qué decir de José (Cortecitas). Nadie canta como él.
No obstante, José representa un cante más moderno, inundado de la esencia de Camarón. Pancho, Juanillo, Juanjo, Abraham o Tin, por su parte, cantan con un eco mucho más añejo. Yo les veo como arqueólogos del flamenco. A veces reproducen cantes que nadie sabe de dónde los sacan, pero que se reconocen claramente como parte de esos de la edad de oro del cante, a principios del siglo XX, cuando el Carbonerillo deslumbraba a propios y extraños con esa velocidad y verdad en la voz.
Juan Pérez se presenta derribando la puerta con una propuesta pianístico-electrónica que me fascina. A día de hoy es el único en este género que incorpora la electrónica como un elemento más allá de lo superficial, de la búsqueda de encajar en la tendencia sonora. Juan te saca el ole con sus «aparatos» porque, como dicen en mi tierra, «no es la flecha, es el indio», y más flamencos que Juan hay pocos.
Desiré nos va a sumergir con su voz única en un viaje que irá desde algunos de los cantes más tradicionales hacia otras partes de la música folclórica de Iberoamérica. Esa rubia tiene una daga en su voz y en su ser que atraviesa a cualquiera que tenga un mínimo de sensibilidad, y el público habitual de la Berlanga la tiene.
* ¿Cual es tu concepto del Flamenco y en este sentido como ves el panorama actual?
Mi concepto del flamenco está ligado a la cultura andaluza, pero especialmente a los gitanos. No es que el flamenco sea exclusivamente gitano, que no lo es. Es que yo lo he aprendido en el barrio, en la boda, en el pedimiento. Además, y por si fuera poco, mi juventud la atraviesa de un extremo al otro la figura del genio más grande que he conocido (y han sido unos pocos ya): el Niño Miguel. Por eso, mi concepto del flamenco está más ligado a una forma de expresarse que a formas musicales concretas o palos. No obstante, siempre invito a diferenciar entre el cuerpo (alegrías, fandangos, soleá o seguiriya, el macho o la escobilla…) y el alma. El alma es la manera de expresarse. Véase al maestro Diego el Cigala, que canta un bolero y suena flamenco. Lo mismo puede pasar a la inversa: que un guitarrista interprete con una técnica y rítmica perfectas una obra de Paco de Lucía y que no suene flamenco.
El panorama actual del flamenco no puede gozar de mejor salud, véase el ejemplo de Reus (vais a flipar el día 25). Otra cosa es el mercado, que se ha encargado obligar a todos los géneros a sonar iguales, en nombre de las visualizaciones. Vivimos en el reino de la cantidad, y las culturas minoritarias, como es la nuestra, no tienen sitio en él. Un disco flamenco es demasiado caro de producir para conseguir demasiado pocas reproducciones.
* ¿Qué pueden aportar los nuevos creadores con estas nuevas visiones?
Estos creadores aportan mucho, precisamente por lo que te dije antes: conocen la tradición y cualquier cosa que hagan llevarán la impronta de Paco, del Niño Miguel, de Camarón, de la Niña de los Peines. Aunque sea un guaguancó, una sonata o un landó.
* ¿En qué momento artístico te hallas y qué proyectos tienes?
Estoy en un momento muy bonito en el que estoy disfrutando como nunca de la creación y la producción. Mi próximo disco será el que probablemente tenga menos que ver con el flamenco. Estoy ya inmerso de lleno en la grabación de un disco a dúo junto al cantante Muerdo. Se trata de una recopilación de nuestras canciones hispanoamericanas favoritas. Pero será, como dicen los flamencos, un repertorio «rebuscado». Nada de redundar en lo previsible. Hemos grabado ya los dos primeros temas en riguroso directo con una big band acompañándonos, al más puro estilo Benny Moré o Tito Rodríguez. Haremos un viaje por las décadas de entre los 50 y 80 y por toda Hispanoamérica, desde Cádiz hasta la Pampa pasando por Lima. Y no será un disco de cantaroes ni de cantantes. Será un disco, como decía el gran Facundo Cabral, de cantores.
* La Fundación SGAE continúa con Nuevos Territorios, un programa en el que artistas consagrados abren las puertas de la Sala Berlanga de Madrid (C/Andrés Mellado 53. Entradas a un precio de 6,50 euros a la venta en taquilla y entradas.com +g.g.) a nuevos talentos que representan la nueva ola musical que marcará los próximos años del género en el que destacan. En este caso el protagonista será el cantante, productor y arreglista flamenco Diego Guerrero, con un cartel a medio camino entre el flamenco más tradicional de Reus de la Frontera y El Cortecitas y la experimentación y fusión de Desiré Paredes y Juan Pérez ‘Aure’, en toda una celebración de la buena salud que vive el flamenco contemporáneo, los días 25 y 26 de abril.