El director del nuevo Ballet Español de la Comunidad de Madrid,, Jesús Carmona, Premio Nacional de Danza 2020 y Premio Benois de la Danse al Mejor Bailarín del Mundo, nos cuenta en esta entrevista los retos, ilusiones y creación de los dos grandes estrenos para la ocasión: Suite española (op. 47) de Isaac Albéniz y Epifanía de lo Flamenco. El Ballet se estrena en Teatros del Canal con 20 bailarines y tres músicos en escena, del 12 al 27 de octubre. Fotos de @DemetriaSolana. Entrevista por @NataliadelBuey
- La dirección de una Compañía parece un trabajo muy costoso ¿cómo estás afrontando este proyecto en el momento de tu carrera en el que te encuentras y qué esperas de él?
Realmente parece un trabajo costoso y lo es. Hay que dedicar muchas horas y calentarse mucho la cabeza para intentar tomar las mejores decisiones en todo momento. Pero creo que ha llegado en un momento de mi carrera en el que estaba preparado para este reto. Tengo la madurez, no solamente artística sino también emocional, y la tranquilidad para poder tomar esas decisiones y para creer firmemente en ellas. Desde el principio he tratado el proyecto con muchísimo respeto, cariño y cuidado, queriendo hacer todo de una forma muy artesanal para que no se escape ningún detalle.
Para mí lo más importante es que cuando se cierre el telón al terminar la segunda pieza la gente se lleve la sensación de haber visto un ballet de calidad. Independientemente de si gusta o no, porque eso solo significará que el espectáculo está vivo y que mueve por dentro, queremos convertirnos en un referente a nivel internacional como ballet. Que lo disfrute muchísima gente en el mundo y que le pueda llegar.
- Poder formar parte de una Compañía pública es un gran privilegio ¿cómo te sientes?
Por supuesto, me siento muy afortunado. Especialmente por haber sido el primero que abra el camino a todos los directores y directoras que vengan detrás de mí. Sentir que yo ayudé a levantar este proyecto, aportando mi primera visión y que trabajé junto con mi equipo cuidando casa detalle, me hace sentir muy privilegiado.
Obviamente tener todo esto de forma privada es inviable. Las posibilidades de espacio, convirtiendo Teatros del Canal en nuestra casa con dos aulas de residentes y nuestro teatro, la Sala Roja o un elenco de 20 bailarines todos los días trabajando 6 horas.
También siento mucha responsabilidad. Sabemos todos los ojos que nos están mirando con más y más expectación. Hemos vendido casi todas las entradas y eso es una locura, pero estoy orgulloso de ver que el proyecto haya dejado de ser una idea y que estemos aquí a pocos días de ofrecer una realidad.
- En este sentido, ¿crees que es importante visibilizar la danza y el arte desde los gobiernos?
Siempre es importante que tenga visibilidad. Las artes escénicas son la sociedad, es algo indivisible. Formamos parte de la sociedad y somos catalizadores de momentos sociales, y, en concreto, creo que la danza necesitaba este apoyo institucional sobre todo para que otras comunidades que tienen sus ballets también se animen y les aporten las condiciones óptimas para poder desarrollarse en su plenitud.
Nosotros hemos tenido un apoyo inicial que esperamos que siga creciendo. Hemos empezado con una cesta de regalos muy potente de la que todo el equipo somos muy conscientes. Todos sabemos que esto es dinero público de la gente, y, por ello, hemos exprimido cada centavo del contribuyente para que no se sienta que se ha tirado en un saco roto ni que se está invirtiendo en una forma que no es la correcta.
- Os estrenáis mundialmente este mismo sábado, Día de la Hispanidad, con un programa en el que hay cabida para la danza española y el flamenco: Suite Española (op.47)” del maestro Albéniz y “Epifanía de lo Flamenco” ¿Qué representan estas piezas para la identidad del Ballet?
En Suite Española mostramos la danza estilizada, la escuela bolera y la estilización del folclore con dos coreógrafos invitados como son Eduardo Martínez y Arantxa Carmona, junto conmigo, la JORCAM y el maestro Manuel Coves, director musical. Exponemos la danza española en toda su amplitud respetando los cánones y el lenguaje de esta danza. En Epifanía de lo Flamenco lo que hacemos es un viaje por la sonoridad del flamenco empezando por los cantes de ida y vuelta y cerrando con unos caracoles, cante típico de Madrid. Enseñaremos desde las formas dancísticas más tradicionales hasta otras formas que se comunican con otras danzas. Queremos mostrar el flamenco de 2024 desde todos sus prismas y con el abanico lo más abierto posible.
